La carretera argentina por excelencia, la RN 40, atraviesa todo el país. Para disfrutarla, conviene alquilar un coche.
Se comienza en las coloridas laderas de la quebrada de Humahuaca antes de ir a Salta para ver los encantos coloniales y los pintorescos pueblos de los Valles Calchaquíes. Conviene parar en la preciosa Cafayate y en Chilecito antes de seguir hacia Mendoza y sus vinos.
Al sur están las lagunas y fuentes termales de Chos Malal. Se recomienda explorar los parques nacionales de Lanín y Nahuel Huapi antes de ir a San Martín de los Andes y Bariloche, donde se podrán realizar todo tipo de actividades al aire libre. Después, un desvío conduce a la cueva de las Manos y su arte rupestre indígena.
Se disfrutan las excursiones de talla mundial de El Chaltén y se conoce el glaciar Perito Moreno. Luego se cruza la frontera hasta Chile para recorrer el impresionante Parque Nacional Torres del Paine antes de la última parada, Ushuaia, el ventoso final de la autopista más meridional del mundo.