La Compañía de Jesús llevó a Argentina la viticultura y las universidades. Muchas misiones jesuitas son Patrimonio Mundial, están abiertas al público y permiten que se manifieste el arqueólogo que todo visitante lleva dentro mientras pasea entre construcciones de piedra bañadas en sol. En la provincia de Misiones, San Ignacio Miní cuenta con las ruinas más impresionantes. En una excursión al cercano Paraguay se verán más restos de este singular interludio histórico.
Misiones jesuitas

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