Construido a principios del s. XX, el Tren Amarillo, con un recorrido de 62 km, es toda una proeza técnica gracias a sus 650 estructuras de ingeniería y 19 túneles. Une Villefranche-de-Conflent y Latour-de-Carol y fue creado para reducir el aislamiento de las comarcas francesas del Capcir y la Cerdanya, aunque en la actualidad, con una red de comunicaciones mucho más eficiente que la existente hace un siglo, constituye un bello recorrido turístico que salva un desnivel de 1200 m, aferrándose en algún tramo a estrechos salientes.