Hay pocos destinos donde el medio de transporte con el que se llega a ellos suponga en sí mismo un atractivo, pero es que hay pocos lugares en el mundo donde es necesario un hidroavión para llegar al hotel. Los veloces Twin Otters hacen las veces de taxis en un país sin carreteras. Despegar desde el agua es una experiencia inolvidable, al igual que observar desde el cielo espectaculares atolones de coral, lagunas azules y minúsculas islas desiertas.