Elinkine es una ajetreada aldea de pescadores, además de punto de acceso a la tranquila Île de Karabane, una antigua estación comercial francesa (1836-1900). En la ciudad homónima se puede ver una iglesia de estilo bretón, con sus polvorientos bancos y sus deterioradas estatuas, y visitar el ruinoso cementerio donde descansan marinos y colonos.